Un señor de 54 años fue invitado a los dominios de una señora de 68 y le aconsejó, con tono sabiondo y perdonavidas, cómo tenía qué hacer su trabajo. Se trata sin duda de un caso de “marichulismo” exacerbado, de flagrante “mansplaining”. Muchos no sabrán de quiénes estamos hablando porque ni el feminismo que quiere llegar solo y borracho a casa ni ningún miembro del equipo de opinión sincronizada que adiestra el presidente del Gobierno han salido a denunciarlo. Y eso es así porque el señor de marras pertenece a ese equipo, se ha declarado “rojo” y se le considera “aliade”. Se llama Jorge Javier Vázquez, JJ para sus seguidores, se pasó por el programa de Ana Rosa Quintana y se permitió darle un par de consejos. Uno: “Deja en paz a Pedro Sánchez”. Dos: “Una vez a la semana no hables de okupas”. Es decir, según el ínclito JJ, Ana Rosa tendría que dejar de tratar dos de los temas que más preocupan a los españoles.