El verano ha venido con su serpiente. Si la primavera finalizó con la crisis del aceite de girasol, ahora el periodo estival tendrá su colofón con los cubitos de hielo. En la zona norte gallega no ha sido para tanto el calor como para agotar los hielos en los combinados, porque los helados no han desaparecido de las estanterías. Además los gallegos está afeitos a tomar las cosas del tiempo, es decir, frescas. Pero es que aquí se importa de todo aunque no haga falta, como la sequía. Habrá que preguntarse si no se está desviando agua del grifo para fabricar cubitos de hielo para la exportación.