La apuesta del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Rías Baixas por los vinos espumosos está dando resultados. La comercialización de estos caldos comenzó hace diez años y desde entonces su crecimiento ha sido exponencial. Ya hay 26 marcas diferentes en los mercados, lo que indica un claro interés por parte de las bodegas para elaborarlos porque la aceptación en los mercados ya es un hecho. Se trata de un producto consolidado del que se han producido este año 146.038 botellas, una cifra récord e impensable hace tan solo un lustro. Todavía queda mucho camino por andar para competir en pie de igualdad con el cava, por ejemplo, pero los datos y las preferencias de los consumidores ahí están, por lo que daremos la bienvenida a 2023 con un espumoso de Rías Baixas.