Mireia Rodríguez, jugadora del Balonmano Albacete, se convertió el sábado en la primera mujer en disputar un encuentro de balonmano masculino en categoría senior en España al formar parte del equipo que se enfrentó al Cabanillas, en el partido correspondiente a la primera jornada de la Segunda división territorial castellano-manchega.
Lo ha hecho un mes después de que el club albaceteño anunciara que iba a formar parte de su plantilla, toda vez que había pedido permiso para inscribirla y que la Federación de Balonmano de Castilla-La Mancha no puso ninguna traba para hacerlo efectivo.
La jugadora estableció otro récord a los 21 minutos de partido, al ser la autora del primer gol de una mujer en un encuentro disputado por hombres en un enfrentamiento en el que su equipo se impuso por 31-26 al conjunto alcarreño.
Rodríguez, de 31 años y residente en la capital albaceteña desde que este verano su marido (Rubén Martínez) fichara por el Albacete Balompié -conjunto de fútbol de Primera división RFEF- ya había entrenado con hombres en otras etapas de su vida, pero nunca competido oficialmente.
La jugadora catalana ha pertenecido a distintos clubes femeninos, pero al carecer Albacete de uno y no poder desplazarse a otras ciudades adyacentes por motivos familiares, solicitó entrenar al CB Albacete.
Fue el entrenador de este club, José María Valerio, quien le sugirió la posibilidad de formar parte de un primer equipo en el que hoy ha debutado y con el que incluso ha fallado un penalti, lo que le ha dado "mucha rabia –ha admitido a Efe con humor-, aunque su función en el equipo "no es la de marcar y sí la de darle velocidad al juego para que marquen otros compañeros”, explicó la jugadora.
Mireia se ha mostrado “feliz” de haber roto barreras con su participación en la liga ya que considera que “el deporte debe ser una vía de escape para disfrutar y el sexo no debe condicionar para que nadie no pueda disfrutar de practicarlo”.
Por ello, ha abogado porque lo logrado sirva para “abrir puertas y que en otras ciudades, en categorías asequibles, otras chicas puedan disputar competiciones con hombres”, circunstancia que, de producirse, le "alegraría" por saber que su caso "ha servido para que ninguna mujer se quede sin jugar”, dijo a Efe.