xulio Ferreiro, el Varoufakis de A Gaiteira, está de vacaciones, de las oficiales, de las que sirven para rascarse la barriga lejos del despacho, porque de las otras lleva desde junio de 2015. Y casi mejor que no ande por A Coruña, porque así se evita el bochorno que supone una nueva cachada faltando a su palabra. Poco después de las elecciones que ganó Negreira, pero tras las que él fue investido alcalde, prometió que recortaría la inversión en fiestas y, al principio cumplió, porque tanto en 2015 como en 2016 montó unas que vaya por Dios, no se recordaban unas celebraciones tan cochambrosas en la ciudad. Sin embargo, ahora todo ha cambiado y no deja de regar de millones al IMCE, que es el que se encarga de montar los saraos. En los últimos meses le ha trasvasado 1,3 millones, con lo que desde enero ha podido gastarse 5,8 millones, lo que supone más que en todo el año anterior y, por supuesto, supera a lo que destinaba el PP a festejos. Una vez más, pues, el Príncipe de las Mareas vuelve a incumplir un compromiso. ¿Alguna vez será capaz de mantenerse fiel a la palabra dada? FOTO: el alcalde, preparado para ir de festa rachada | quintana