CIEN días, con sus correspondientes noches, han transcurrido desde que Pedro “La sonrisa” Sánchez es presidente del Gobierno. Si fuese por él aún habría que sumar muchos cienes y cienes más, pues ayer en un acto que le montó en Oviedo Adriana Lastra, la nini intelectual –sus estudios se reducen a unas nociones de antropología– que ocupa la vicesecretaría general del PSOE, anunció que quiere seguir en la Moncloa hasta 2030. Sería terrorífico. Con todo, eso no ha sido lo más divertido de los fastos de los primeros cien días, sino el vídeo publicado en Twitter en el que Sánchez asegura que su Gobierno cumple lo que dice. Claro, no explica si se refiere a lo que dice inicialmente o a lo que dice después, porque nunca se había visto semejante colección de rectificaciones: impuesto a la banca, defensa del juez Llarena, amnistía fiscal, Valle de los Caídos, agotar la legislatura, financiación autonómica, inmigración, Radiotelevisión Española, impuesto de la renta, venta de bombas a Arabia Saudí... ¿Será por eso que el presidente suspende en todas las encuestas dadas a conocer durante el fin de semana? FOTO: pedro sánchez levanta las manos, pero no para rendirse | efe