lo bueno de que las elecciones, tanto las generales como las municipales, hayan sido tan ajustadas, es que, a estas alturas, los ciudadanos se lo están pasando bomba viendo los diferentes estados de ánimo de los políticos. Así, están los que matan (como la Estaban por su Andreíta) por lograr un puesto (a algunos parece que hasta el de ujier les vale, ojo, con todo los respetos para los ujieres). Estos, serían los de Podemos, ansiosos de pillar cacho como sea. Otros, están que no estan, pero, por supuesto, quieren están. En este grupo podría entrar Ciudadanos, que quiere pactar con el PP, pero no con Vox, aunque podrían sentarse a hablar con Vox, que no negociar y, si todo falla, pues les queda Sánchez. Luego están los sobrados, por supuesto, todos ellos socialistas, dispuestos a gobernar en solitario, que para eso tienen al primo Pedro, el del zumosol. Por último está Casado, que no sabe lo que hacer por conseguir lo que sea para que su fracaso electoral se pueda vender como éxito. Ah, y queda Vox, que es el dueño de la pelota. Al final decide quién va a jugar y quién no. FOTO: un ciudadano votando en las pasadas elecciones | aec