La psicomotriz Claudia Delso es miembro destacado del pelotón de los torpes de la Marea, nasía pa’ganá, –tan solo un concejal está fuera de esa categoría–, pero nunca se le podrá agradecer suficientemente su disparate de redistribuir A Coruña en 305 barrios –que incluyen zonas asimétricas, postfuncionales, calcificadas...–, ya que así frustró el principal anhelo vital de Iago Martínez, el Rasputín de Teis: desordenar el movimiento vecinal. Sin embargo, ese acierto no compensa la cadena de desaguisados que orla su labor en María Pita. La culminación ha llegado con la adjudicación de la cárcel. El fiscal, que sospecha que la Marea, nasía pa’ganá, incurrió en prevaricación, reclamó al Concello la documentación relativa al asunto y Delso entregó un dossier en el que faltaban 35 páginas de un total de 54. Su explicación fue antológica: “Fue un error administrativo”. Qué mal suena esa frase. Tiene toda la pinta de que también esto se lo van a comer los funcionarios. Por cierto, ¿el alcalde no es un experto en Derecho Admnistrativo? Pues que monte una pasantía en María Pita. FOTO: delso juguetea en un parque biosaliudable ante la supervisión del alcalde | aec