La impuntualidad de la Marea

ABRIR una caja de bombones es reconfortante; destapar la de los truenos, terrorífico, pero hay otros embalajes cuya apertura puede producir todo tipo de sensaciones. Así ocurre, por ejemplo, con la caja de las sorpresas, salvo que levante la tapa un miembro de la Marea, nasía pa’ganá, porque entonces se puede dar por seguro que el chasco será desagradable. Basta con pensar en lo que ocurre con el diálogo sobre los presupuestos para comprobar que una vez más ha surgido una sorpresa fastidiosa. Pese a que el plazo para negociar las alegaciones está a punto de expirar, la xente do común ha decidido rechazar las reiteradas sugerencias de la oposición para consensuar una propuesta y ha advertido de que no mantendrá reunión alguna hasta el miércoles. Pero, ¡oh, casualidad!, el plazo para presentar las alegaciones vence el día anterior... ¿A alguien se le ocurriría celebrar San Juan la noche del 24 de junio y no la del 23? Pues tiempo al tiempo, todo se andará. Con Xulio Ferreiro, el Varoufakis de A Gaiteira, no hay nada imposible.

Años y años que quieren diseñar el futuro de Galicia

EL único carné de candidato a la Presidencia de la Xunta expedido hasta ahora es el de Feijóo. Ana Pastor, el rostro humano del Beneguai, el ya octogenario Beiras y José Luis Méndez Romeu merodean en torno al turnomatic para ver si cogen número, pero aún no saben si saldrán agraciados en el sorteo. Durante su espera, surge la pregunta: ¿hay algo que una a los tres? Sí, los muchos, muchísimos, años. La voceira del Bloque es una niña en comparación con sus compañeros, pero las ideas que defiende, las de la UPG, son más antiguas que la suma de las edades del nacionalista del pelo crecho y del socialista. El primero de ellos ya es octogenario y el segundo lleva metido en política casi desde los primeros tiempos de Francisco Vázquez, el coruñesismo hecho hombre, en María Pita... Que la izquierda ponga en sus manos el futuro de Galicia no es buena señal. Añejo, el licor café; pero para la política, mejor la cosecha del año.

 El negocio de la tila

LAS ventas de tila se han disparado en Galicia desde el momento en el que la jueza Pilar “Perdóname que insista” de Lara decidió apartarse del caso “Garañón” mientras la Audiencia de Lugo resuelve sobre la recusación planteada por Gómez Besteiro. Los implicados en los millones de sumarios que instruye la magistrada están presos de un ataque de nervios, pues temen que al disfrutar de más tiempo libre lance contra ellos una ofensiva de las que hacen época. La patronal de las herboristerías ya piensa en concederle su medalla de oro.

 La coleta de Feijóo

CUANDO Feijóo aseguró que es “más de Podemos que los de Podemos”, la reacción general fue de escepticismo, porque no es fácil imaginárselo con coleta. Sin embargo, los hechos han ido dándole la razón y más con su defensa del voto electrónico para mejorar la participación de los emigrantes, que sería algo así como una versión enxebre del método que usa Podemos para sus consultas a las bases. Va a tener que dejar de ir a la peluquería durante una temporada.

 La inocencia de Garzón

GARZÓN, no Baltasar, sino el tal Alberto, es la nueva pieza que se ha cobrado Pablo “Viva la Gente”. Y no es un trofeo de caza menor, pues en el lote va Izquierda Unida al completo. Pero a Garzón le da un poco de miedo que el pack quede diluido por completo y le ha pedido a su nuevo jefe que respete la identidad de IU. ¡Qué inocente! Si se diese una vuelta por Twitter y leyese los últimos comentarios de Ramón Cotarelo, catedrático emérito de Ciencias Políticas y exprofesor de Iglesias, no solo no haría semejante solicitud sino que saldría corriendo. “¿Va estando ya claro que este hombre, además de narcisista y prepotente, es tonto?”, se cuestiona a modo de pregunta retórica Cotarelo con relación a Iglesias. Garzón está avisado, él verá lo que hace.

 Venezuela ya no es un destino atractivo

YA no mola vivir en Venezuela. Cuando Maduro redujo la jornada laboral semanal a cuatro días, la cosa prometía. Con tanto tiempo libre, si uno sentía morriña, podía acercarse hasta la licorería que regenta el sanguinario De Juana Chaos, el etarra cuya libertad pedía el diputado coruñés de En Marea Antonio Gómez-Reino, Tone, y a lo mejor hasta caía un bacalao al pil pil o un marmitako. Pero ahora que el heredero de Chávez ha decidido cortar la luz durante cuatro horas al día y la principal cervecera del país ha anunciado que tendrá que suspender la producción porque no puede importar cebada de malta, ya no apetece emigrar, salvo que uno sea un bolivariano convencido, que lo hay, eh.

 Una ciudad a medio hacer

LAS obras del saneamiento, los aparcamientos, las conexiones por tren, las aceras, los asfaltados... Ferrol da la impresión de ser una ciudad afectada por un constructor a la fuga, que se piró con el dinero después de tirar los tabiques. Mientras otras ciudades comenzaron hace más de 30 años a ponerse al día en obras y servicios, en la ciudad departamental solo se han hecho promesas y más promesas. Los políticos ocuparon las dependencias del palacio municipal para sentarse a velas vir, sin otro interés que salir en alguna foto. Resulta curioso que otras ciudades vecinas estén ya en la época de las smart cities, mientras que por aquí se hable de construir beirarrúas  o de cómo van a dejar caer al barrio histórico del puerto.

 La poesía catalana y la prosa alemana

EL presidente de la Generalitat, Carles Puigmenont, se levantó poético el día de Sant Jordi y llamó a los catalanes a defenderse de los “dragones feroces que nos quieren atenazar”. En los despachos de Volkswagen todo es más prosaico y la única preocupación son los 16.000 millones de euros que tendrá que pagar por el fraude de las emisiones de gases trucadas en sus coches. Esa cantidad de dinero es la misma que costó el rescate de Catalunya Caixa. Cuando se enteren los independentistas de que uno de sus emblemas económicos vale tanto como unos motores estropeados le va a dar un síncope.