NO tiene suerte últimamente Pedro “La sonrisa” Sánchez con Twitter; realmente no la tiene con Twitter ni con nada. Desde que le cortaron la cabeza en el partido le caen por todas partes y de todos los colores, con la circunstancia agravante de que las bofetadas –los zascas que dicen los que están en la onda del chío– que recibe en la red social del pajarito están a la vista de todos. Todo digno tuiteó: “Desde el fortalecimiento del socialismo democrático y de las fuerzas progresistas podremos frenar a la ultraderecha que hoy lidera Trump”. Los mínimo que le contestaron fue: “No puedes frenar a Susana y vas a frenar a Trump...”. Ayer, disfrazado de runner, tuiteó a las siete de la mañana, “Pocas cosas te hacen sentir tan bien y con las pilas cargadas como correr por las mañanas”... Según un reputado hacker, su mujer le mandó al momento un mensaje privado: “Cuando vuelvas a casa trae churros, Usain Bolt”.