FRAGA, Rouco y Villanueva forman el trío de ases de la baraja de Vilalba; con el capón compondrían el póquer, y atribuyendo a Miguel Anxo Fernán Vello el papel de comodín compondrían el imbatible repóquer. El escritor nació en Cospeito, así que habría recurrir al subterfugio de conceder el título de hijo adoptivo de la capital de la Terra Chá. La verdad es que se lo merece, ya que en un mitin en la localidad chairega afirmó: “La alianza fraterna de las izquierdas nos liberará de la peste bubónica y propiciará el cambio político”. ¡Qué bonito! No hay nada como nacer con alma de poeta. Habrá que ir encargando a Heraclio Fournier el diseño de los naipes vilalbeses.