¿Qué parentesco puede haber entre ambos? La verdad mucho y poco, según el cristal con que se mire. Hace apenas unas semanas que uno de los ediles, Alberto Lema, manifestó el deseo de la Marea de subordinarse a su homónima de Santiago en relación al tráfico comercial aéreo, por lo que cabe preguntarle ¿por qué no al revés? Y que se subordine Lavacolla al tráfico de Alvedro. El aeropuerto santiagués desde su construcción fue creciendo a golpe de BOE. Mientras que el de Alvedro lo hizo con sudor y lágrimas para poder saclir adelante y ahora unos señores elegidos para que sean representantes de la ciudad se presenten en el palacio municipal y eligen el modelo que solo ellos quieren para la ciudad, dejando a esta con el servicio aéreo y los destinos que a ellos se les antoje.
Los datos ofrecidos por Lema, de un 50% de pasaje de negocios y otro 20% dedicado al turismo no son objetivos sino interesados ¿A quién beneficia esta situación? Si quiere más pasajeros de turismo tendrá que hacer políticas adecuadas y no echarlo a pique. Si ese 20% le parece poco tendrá que hacer algo, para eso fue colocado en el sitio que le designó su partido.
Creo que Lema no está a la altura ni cualificado para ser un edil que represente a La Coruña, sino más bien por sus declaraciones lo hace por Santiago. Esto no es localismo, es defender los principios básicos de la economía coruñesa. Si esta ciudad tiene un aeropuerto hay que luchar para que prospere, no que se empobrezca; para eso no se necesita concejal alguno, por tanto si el puesto le viene largo que dimita, pero Alvedro es para los coruñeses la piedra angular de su desarrollo comercial y turístico, ya que aporta un parte importante de la riqueza y prosperidad de la que disfruta esta ciudad.
Si la Marea no defiende el desarrollo de Alvedro e hipoteca su futuro al de Lavacolla habrá firmado la ruptura de su compromiso con la ciudad y esto lo verá reflejado al igual que aconteció con otros políticos que dieron la espalda a la ciudad, para recordarles a nuestros munícipes que esta es una crítica constructiva para el aprendizaje; los triunfos y veleidades no enseñan, nada. Va a tener razón el viejo refrán que dice “xente nova e leña verde, todo é fume”.
Los representantes comerciales y turísticos claman contra esta propuesta en la que ven una seria advertencia de desmantelar Alvedro y desviar su tráfico a Santiago, por lo que La Coruña quedaría excluida del circuito turístico y no se molestarían en venir a esta ciudad por diversos motivos, bien propios o ajenos.