LOS Le Pen, que ya van por la segunda generación de aspirantes a que Francia tenga un presidente facha, han depositado ahora sus esperanzas en Marine. Ella, como corresponde a una jefa del Frente Nacional, disfruta de una capacidad especial para desbarrar, de la que da muestras con afirmaciones como que se ha acabado la educación gratuita para los hijos de extranjeros irregulares. Da miedo pensar lo que puede ocurrir en Francia, porque Trump ganó las elecciones en EEUU prometiendo disparates similares.