Pocas veces se tiene la oportunidad de escuchar la ópera de Georges Bizet “Los Buscadores de Perlas”, el primer éxito del compositor tras su estreno en el Théâtre- Lyrique de París en 1863. Una obra que satisfacía los gustos y requisitos del momento: Tema exótico y una vocalidad dentro de la estética francesa asomando hacia la lírica italiana. De mano de la Real Filharmonía de Galicia hemos tenido la oportunidad de escucharla en versión concierto dos veces en esta semana: en el Auditorio de Galicia de Santiago de Compostela y en el Teatro Afundación de Vigo.
La RFG, integrada por cincuenta músicos de diferentes nacionalidades, dirigida en esta ocasión por Paul Daniel, brilló a lo largo de los tres actos de la obra, apostando además por los nuevos intérpretes de nuestro actual panorama musical, reflejado en la elección de los jóvenes cantantes: la soprano zaragozana Ruth Iniesta, en el comprometido y muy bien resuelto papel de Léïla; el tenor Francisco Corujo, toda una promesa, en Nadir; el bajo, discípulo de Alfredo Kraus, Felipe Bou, en Nourabad y de nuestra cantera gallega, el barítono ortegano Borja Quiza, en un sobresaliente Zurga que a nadie dejó impasible, junto al coro “Gli Appasionatti” dirigido por la viguesa Nuria Lorenzo.
Así, deliciosamente, fue transcurriendo la música del que un día fue discípulo de Gounod, relatando una historia de pasión y amistad, de amor, lealtad y perdón. Una música de exótico orientalismo reflejado en los recursos orquestales, la habilidad instrumentadora y el color vocal que nos transportó a evocadoras atmósferas oníricas en delicadísimo y absoluto refinamiento. La elección, perfecta. La interpretación, sin desperdicio, haciéndonos vivir, pensar y sentir momentos únicos con esta perla de la literatura musical que se ganó la larga ovación del público entregado a la orquesta, a los solistas y al coro. A todos ellos… ¡Enhorabuena!