Jugar a estas alturas a intentar dilucidar los posibles pactos que se pueden producir tras las elecciones del próximo domingo es poco menos que hacer un brindis al sol. Sin embargo, es cierto que hay pequeños detalles que van trascendiendo y que pueden dar pistas de lo que puede suceder. Así, el hecho de que todo el mundo asuma que la negociación para un posible pacto entre PSOE y Ciudadanos la llevará por los naranjas Inés Arrimadas se interpreta como que aquel “no” de Rivera a Sánchez se ha ido convirtiendo en un “depende”. Parece que eso de estar en la oposición no seduce a los de la formación naranja.