del Gobierno de Pedro Sánchez se puede decir, sin error a equivocarse, que ha anunciado grandes medidas y no ha ejecutado ninguna. En su defensa se alega que tampoco lleva tanto en La Moncloa, pero está claro que lo suyo, más que un Gobierno, parece una agencia de publicidad. Una de sus últimas medidas estrella ha sido la de subir el IRPF a aquellos que tienen las rentas más altas. Los socialistas han fijado la barrera en los 150.000 euros anuales. Es decir, que pretende meter en cintura a los ricos o los que lo son bastante. Sin embargo, esa medida ya ha sido analizada y supondría para las arcas del Estado menos de cuatrocientos millones anuales. Es decir, menos de lo que pretende darle a Cataluña al mes. Los ricos de verdad ya buscan el modo de no declarar a través del IRPF, aunque Pedro Sánchez y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no lo sepan. FOTO: María JeSús Montero, ministra de hacienda | aec