Uno de los trescientos portavoces del “renacido” PP, que enjauló a su símbolo más viejo, nos contó que Bárcenas le da asco pues es un delincuente encorbatado con abrigo”. Otro problema para él y sus correligionarios pues trajeados y encorbatados, con gabardina o abrigo según el clima, tienen en el “trullo” a Matas, Fabra, Granados y un amplio etcétera a los que, según los jueces, se pueden unir otros cien más…
Pero es que al PP, cada vez que abre la boca para ocultar algo, se le aparecen sus fanasmas… ¡y mira que los tiene! Ya hace un tiempo el maestro O’ Rivas negaba que los populares fueran conservadores cuando ni conservaban el medio ambiente, los derechos civiles conseguidos, las conquistas del mundo laboral, etc…
Y ahora, pese a sus proclamas e intentos por situar al PSOE como partido radical, la ciudadanía les sitúa a ellos como radicales –de derechas, claro– y al otro lado a Podemos….
Pero es que, a pesar del cierre de filas de la brunete mediática, unidos al grito de nosotros o el caos, el pueblo –la ciudadanía– en cada encuesta, cada vez que le piden opinión, le dice al PP que hay otra vida… y que ya conocen el caos.
Una encuesta del ABC, pese a todos los equilibrios, asegura los 131 diputados que le concede al PP no llegan, ni de lejos, para evitar la victoria de la izquierda….
Y, por otra “banda”, la “enquisa” de Metroscopia para El País, sitúa a Mariano Rajoy a la cola de las preferencias de los españoles, para pilotar un nuevo gobierno, pues le ven incapaz de reducir as desigualdades; con menos capacidad para dialogar y pactar y porque no sabría pilotar la reforma de la Constitución de modo que resultara aceptable para el mayor número posible de españoles …
Esta encuesta señala a Pablo Iglesias como “el más preparado para reducir las desigualdades” y apunta a Pedro Sánchez como el mejor para dirigir la reforma de la Constitución
En conjunto, gana Sánchez con un 25% y Rajoy se sitúa a pié de igualdad con Rivera e Iglesias…
Esta es, a día de hoy, la cruda realidad a la que se enfrenta el PP, a quien no le vale un cambio de caras, de “poster” o la “amenaza” de venir casa por casa a contarnos las maldades del rival….
El paisanaje lo dice: no conservan nada.Son unos radicales.