Alejandro Arribas se fue de A Coruña dejando dudas en el deportivismo. Los aficionados no sabían si quería ser futbolista o boxeador, puesto que lo mismo golpeaba un balón que una cara. Parece que en México le van bien las cosas, él se declara feliz –¡qué afortunados son sus compañeros del Pumas– y desde allí analiza los problemas existenciales del equipo blanquiazul: “El Deportivo necesita saber qué quiere”. ¿Viqueirón por la escuadra? ¿Gancho al mentón? ¡Qué más da! El caso es que ha acertado de pleno con su diagnóstico y mientras no se despeje esa incógnita no habrá nada que hacer. FOTO: arribas | aec