LA investigación del caso “Taula” ha permitido descubrir que el PP de Valencia tenía hasta cinco “cajas B”. Llevar al día la contabilidad de semejante entramado financiero tolea a cualquiera... y aún así hay quien se indigna con Rita Barberá. ¡Qué falta de sensibilidad! Hay que ser un poco más piadoso ante la enfermedad ajena, porque no cabe duda de que tantos años como jefa de esa pseudosucursal bancaria le han causado graves daños a la exalcaldesa. Pero a ella, pese a estar rodeada de tanta pasta, ni se le ocurrió tocar un euro para someterse a un tratamiento médico. ¡Qué integridad!