Carmena reniega de sus ideas

A Manuela Carmena poco a poco se le fue apagando la estrella en el panorama político. La ruptura con Podemos y su matrimonio electoral con Íñigo Errejón bajo el nombre de Más madrid parecían la mejor idea que se le podía haber ocurrido, pero las urnas, de forma sorprendente, le dieron menos respaldo del esperado y las alianzas post comicios hicieron el resto. El plan de la exalcaldesa de Madrid era articular una lista para las municipales en la que las siglas de partido no fuesen determinantes y tuviesen cabida perfiles de la sociedad civil que aportasen trabajo de calidad en el Ayuntamiento. Un pensamiento que a cualquiera que no se dedique a la política le parecería un ejemplo de sentido común, pero que la maquinaria electoral se encargó de desmantelar. Porque hay revoluciones que no interesan. Lo más triste de esta historia es que ahora Carmena considere que se equivocó al intentarlo.