En contra de lo que afirma la leyenda urbana, es una absoluta mentira que las ayudas sociales estén acaparadas por los inmigrantes. Como tienen poco dinero, usan mucho el transporte público y los espacios gratuitos de ocio, y parece que son más, pero no superan el 10% de la población, y reciben aproximadamente el 13% de las ayudas, que en parte proceden de la UE.
En plena ofensiva xenófoba, es incomprensible que las ayuntamientos españoles no públiquen la cuantía y los destinatarios de estos fondos. Calculo que en Ferrol, los inmigrantes son el 3% de la población, y no reciben más del 5% del monto total. La mejor arma de la Democracia contra la mentira, es la información. Si discriminasemos legalmente a los 4.5 millones de inmigrantes asentados en nuestro país, ¿qué derecho tendríamos a protestar, si los 3.2 millones de españoles emigrados en el extranjero recibiesen el mismo trato?