De Gabriel Rufián, el republicano catalán en cuyo honor compuso la banda de música del Congreso el pasodoble “Rufián, eres el más grande, se ve que eres un charnego”, versión 3.0 del clásico “Marcial, eres el mas grande, se ve que eres madrileño”, se sabía que no es precisamente un hombre de palabra. Juró y perjuró que el 2 de octubre de 2017 dejaría de ser español, pero ya han pasado casi dos años de esa fecha y sigue sin cambiar de nacionalidad. Ahora se ha sabido también que es un poco ignorante de más. En una de sus delirantes declaraciones ha afirmado que tiene la sospecha de que Felipe VI es “votante de Vox. Igual me equivoco, pero diría que sí”. Pues sí, ¡vaya equivocación! El rey de España tiene derecho a votar, pero, igual que su padre, nunca lo hace en unas elecciones. Solo acude las urnas en el caso de un referéndum. Ay, esa sangre de Sierra Morena que corre por las venas de Rufián, qué malas pasadas le juega con tanta frecuencia. Se calienta, se va del pico y él mismo se pone en evidencia ante los ciudadanos del imperio y ante los de la república.