TUVO que haber algo más que chococrispis en el desayuno de los jefes de Ciudadanos, porque tanto Albert Rivera, el político antes conocido como Adolfo Suárez, como Inés Arrimadas, musa del sector pijo de C’s, es decir, de todo el partido, empezaron la jornada a trompazo limpio. Carmen Calvo, aquella ministra de ZP célebre por confesiones como: “Me gusta madrugar para poder pasar más rato en el baño: allí leo el periódico, oigo la radio, oigo música y hablo por teléfono con alcaldes en bragas”, afeó a través de Twitter el apoyo naranja a los Presupuestos y Rivera le respondió: “Los socialistas, cada vez más irrelevantes y más podemizados”. El presidente del Parlament, Roger Torrent, que por fuera es muy parecido a Trapero y por dentro igualito al exjefe de los Mossos, se comió una pregunta retórica de la lideresa catalana que lo dejó sin habla: “¿Se da cuenta de la barbaridad que supone que usted diga que ningún juez tiene legitimidad para perseguir al presidente de los catalanes”. A lo mejor aderezaron los chococrispis con chile, ¿quién sabe?