Asturias, Galicia, Aragón y Castilla y León firmaron ayer una declaración institucional reclamando al Gobierno que impulse un nuevo modelo de financiación autonómica basado en el principio de igualdad que, entre otras cuestiones, ayude a frenar el “grave” problema de despoblación que sufren.
El documento fue suscrito en el palacio del Conde Luna de León por los presidentes de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; Galicia, Alberto Núñez Feijóo; Asturias, Javier Fernández, y Aragón, Francisco Javier Lambán.
Como anfitrión de todos ellos, Herrera fue el encargado de desgranar el contenido del documento firmado por estas cuatro comunidades, que cuentan con algo más de siete millones de habitantes y representan el 36% del territorio nacional.
Intereses comunes
El presidente de la Junta de Castilla y León recalcó que estas cuatro comunidades comparten intereses comunes, fruto de sus características socio-económicas, así como de su relación de
vecindad y de sus profundos vínculos históricos.
Al respecto, indicó que ya colaboraron activamente en los trabajos preparatorios para promover e impulsar un nuevo modelo de financiación autonómica, que se fundamente en el pleno respeto a la Constitución, y en concreto, al principio de igualdad entre todos los españoles.
Por su parte, Feijóo, reconoció que es necesario reforzar las
estructuras rurales y que es “vital” el desarrollo de las infraestructuras tecnológicas.
Por ello, estas cuatro comunidades reclaman al Gobierno que no haya municipios sin una cobertura mínima de treinta megas y que la mitad de los hogares cuente con una cobertura de cien megas, algo que para el gallego “se puede conseguir” lo que, según sus propias palabras, “ayudará a que el medio rural, ese espacio vacío, vuelta a tener población”.
Asimismo, Nuñez Feijóo recordó que estas cuatro comunidades tan solo son superadas en población por Andalucía, al tiempo que aseveró que esta declaración institucional sobre financiación y reto demográfico recoge propuestas “que no sólo benefician” a estos cuatro territorios “sino al conjunto de los españoles”, aunque ha dejado claro que la “lógica de este encuentro sería incomprensible para quienes quieren transformar los límites autonómicos en fronteras y los desencuentros políticos en zanjas insalvables”.
Sin improvisaciones
Al respecto, el presidente gallego ha subrayado que este acuerdo “no nace de una improvisación”, ya que estas cuatro comunidades llevan años trabajando de forma conjunta, lo que dio sus frutos, y como ejemplo de ello es el hecho de que Europa “ha hecho suyo el problema demográfico” o que se haya dado un impulso al Camino de Santiago, ya que se pasaron de tres mil compostelas entregadas en 1987 a 300.000 el pasado año.
Asimismo, defendió un modelo de financiación que parta del coste efectivo de los servicios prestados al tiempo que apeló a la necesidad de abordar el reto demográfico “como una prioridad política” y considera que “políticas de conciliación y discriminación positiva en fiscalidad” pueden tener efectos positivos.