Aplicar las medidas de forma efectiva para que se respete el confinamiento no es tarea fácil. Al inicio de la pandemia, la falta de conocimiento sobre la gravedad de la situación fue la principal enemiga de Policías Locales y Nacionales, que reconocían frustrados lo difícil que era convencer a la gente de quedarse en sus casas. Veintiún días después, tras el aumento de la presencia policial y militar por las calles y con una mayor concienciación por parte de la ciudadanía, las cifras de denuncias de Ferrol se redujeron notablemente, pese a que los desafíos son diferentes.
El pasado viernes, según informaron fuentes municipales, se registró por primera vez una jornada sin ninguna denuncia. Se marca así la mejor semana en este ámbito desde que el Concello comenzara a contabilizar las infracciones el pasado 16 de marzo, cuando el operativo para contener la pandemia aún estaba en la fase inicial de configuración.
Así, durante la primera semana de confinamiento se registraron 79 denuncias, con bajas cifras los primeros dos días al decretarse medidas parciales –16 y 17 de marzo, con cuatro y tres multas, respectivamente– que en las jornadas siguientes crecieron exponencialmente con la vorágine del aprovisionamiento –alcanzando las 25 el día 19, el mayor número registrado hasta la fecha–. La siguiente semana, del 23 al 29 de marzo, dicha cifra creció hasta las 83 denuncias –un 5% más–, aunque el resultado responde principalmente a los dos primeros días, con 18 y 20 denuncias, respectivamente, dado que, como aclaró la Policía Local, tras el fin de semana posterior a la festividad de San José se incrementó notablemente el flujo de vecinos saliendo de sus casas.
En esta semana se puede observar también como la incorporación de seis nuevos agentes de la Policía Local, sumada al despliegue de más de un centenar de profesionales del Tercio Norte de Infantería de Marina por toda la comarca, marcaron un descenso en el número de denuncias a partir del día 26 de marzo.
Finalmente, esta semana, en la que se activó el endurecimiento de las medidas de confinamiento desde el día 31, se registraron únicamente 23 multas, lo que supone, pese a faltar dos días para completar el período, una caída del 70,8% respecto a la primera semana y del 72,2 en la segunda.
Operación Balmis
La presencia militar en las calles resultó clave a la hora de reducir los desplazamientos ciudadanos. A pesar de que al comienzo de la misma, el pasado día 26, las labores de los soldados se centraban en la asistencia, las labores de desinfección y la protección de infraestructuras básicas como estaciones de trenes, con el paso de los días comenzaron a patrulla los municipios de la comarca.
En las dos últimas jornadas, según informó el Ministerio de Defensa, la presencia de Infantes de Marina en Ferrolterra se centró en los municipios de Ferrol, Fene, Narón y As Pontes, con despliegues también en determinados puntos de la ciudad de A Coruña. No obstante, dichas fuerzas se verán reforzadas en los próximos días por unidades del Cuerpo General de la Armada, la 31ª Escuadrilla de Escoltas y las escuelas de especialidades de A Graña y Antonio de Escaño.