El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se coló ayer en el debate asambleario del BNG, que culmina el próximo domingo en un plenario clave para la decisión del camino que adopta electoralmente la organización frentista, para sugerir a la formación nacionalista que “no hagan seguidismo del populismo” de las mareas.
En una intervención a propósito de las “amistades peligrosas” –en referencia a personas imputadas como el denominado conseguidor de la “Zeta”, Pachi Lucas, o el narcotraficante Marcial Dorado–que le echó en cara el portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, Feijóo sacó pecho de la “actuaciones” de su Gobierno para evitar los casos de corrupción y se refirió a la acción política del BNG y las decisiones internas pendientes.
“Somos el Gobierno más contundente contra la corrupción y somos el Parlamento más contundente contra la corrupción”, proclamó Feijóo, tras recibir los reproches de Jorquera por los casos como la “Púnica” u otros que se investigan con respecto a la actuación de su partido en la Comunidad Valenciana. “Su partido, hasta que se regenere, está inhabilitado para gobernar”, le avisó el diputado nacionalista.
Pero Feijóo, que apeló a los “cinco textos” comprometidos en el debate del estado de la autonomía del pasado año (cuatro aprobados y uno en curso), cuestionó que “sea un ejemplo de regeneración democrática” la declaración aprobada por el pleno de Pontevedra de persona non grata al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y llamó al BNG a “no seguir por ahí”, ya que todavía “no” está en “caída libre” en el municipio que gobierna Miguel Anxo Fernández Lores.
No en vano, en su intervención, el dirigente autonómico reivindicó al BNG como una fuerza política que “no es vieja” y “no tiene que extinguirse” porque haya dejado de “ser útil para Galicia”, introduciéndose, de este modo, en el debate interno en el que se encuentra la formación frentista, en el cual está planteado el calado de su “refundación” y si se revisa la estrategia electoral –abriéndose por primera vez a fuerzas que no sean netamente gallegas (lo que posibilitaría formar parte del proyecto de las mareas)–. “No creo que el BNG sea un partido viejo, que tenga que extinguirse, puede seguir siendo útil a Galicia”, manifestó Feijóo, después de que el todavía portavoz nacional del Bloque, Xavier Vence, plantease que la marca no debe ser un “impedimento” para la refundación del “proyecto nacionalista”, si bien lo más relevante sería una organización sin colectivos internos, como la UPG (en que milita Jorquera).
No obstante, el también líder del PP gallego dijo que el BNG puede “seguir siendo útil si no hace seguidismo de partidos minoritarios, como ocurrió –dijo– en el Ayuntamiento de Pontevedra el pasado lunes”.