El Camiño de Santiago gana adeptos. Así, lo constata el incremento del número de peregrinos que se hospedan en los albergues de Neda y Pontedeume, los únicos que posee la ruta jacobea en la comarca. Así, en Neda han hecho noche en los últimos tres meses unas 1.200 personas, la mitad del total que hubo en todo el año 2017 (2.380). Hasta el momento, el mes de julio es en el que se han constatado más pernoctaciones (533) a la espera de conocer las cifras del mes de agosto.
El albergue de peregrinos de Neda, la primera parada de la ruta que parte de Ferrol, es el que mayor capacidad tiene de todos los refugios del Camiño Inglés, con 28 plazas. Además, el Concello habilita por segundo año consecutivo el pabellón del IES Fernando Esquío para los grupos más numerosos –entre 30 y 60 personas–. “Este ano melloramos o servizo que se lles presta aos peregrinos cun punto de información turística que financia a Mancomunidade de Concellos e que ubicamos nun primeiro momento na Casa da Cultura e logo trasladamos ao albergue porque vimos que era o máis operativo”, señaló la concejala de Cultura, Cristina Bouza, quien también recordó la renovación del mobiliario realizada el pasado año en el centro donde se habilitó una zona de estar y se cambiaron colchones y almohadas.
El gobierno local también editó este año una guía para los peregrinos sobre lo que pueden hacer y ver en Neda durante su corta estancia. “Neda é a parada da primeira etapa e os peregrinos soen ter toda a tarde libre polo que vimos oportuno editar esta guía para orientalos sobre os nosos recursos”, señaló la edil. La campaña también implica a hosteleros y panaderías del municipio que lucen en sus fachadas el logotipo distintivo de la iniciativa –ver en la imagen 2–.

En la villa de los Andrade
En Pontedeume, las cifras constatan también un crecimiento continuo del interés que despierta en los peregrinos la villa de los Andrade. Así, el pasado 2017 pernoctaron en el albergue ubicado en las lonjas de Raxoi un total de 3.111 personas, una cifra que esperan superar o por lo menos mantener en el presente ejercicio, tal y como señaló la concejala de Turismo, Yolanda Vázquez.
El pasado mes de junio hicieron uso de las instalaciones 400 personas, 40 más que en el 2017; mientras que en julio hicieron noche 554 –522 el pasado año–. “Cifras que se incrementan si contabilizamos los 1.132 peregrinos que pernoctaron hasta ahora en el pabellón municipal A Casqueira en grupos organizados”, indicó, un servicio disponible para grupos de más de 15 personas y que requiere una solicitud previa –con diez días de antelación para poder compaginar los usos con los de las actividades deportivas previstas–.
El gobierno local abandera un proyecto de rehabilitación del antiguo “hospitalillo” para su conversión en albergue de peregrinos y sustituir así las instalaciones provisionales habilitadas en el antiguo almacén de pescadores en las lonjas de Raxoi y dotar el servicio de mayor capacidad –el de ahora tiene capacidad para 20 personas y el que se pretende habilitar constaría de dos plantas–. Para ello se han iniciado conversaciones con la Xunta para recabar su respaldo económico para la equipación del inmueble una vez sea reformado–fue cedido por el Arzobispado al Concello–. “Coa rehabilitación deste inmoble emblemático na vila ademáis de dotar dun mellor servizo ao pregregrinos, conseguiremos dinamizar Pontedeume e mellorar a imaxe pública da zona”, puntualizó el alcalde, Bernardo Fernández. l