El tiempo seco que ha predominado durante todo el otoño ha permitido que el aparcamiento público de la explanada del Sánchez Aguilera todavía no se haya convertido en una zona intransitable, sin embargo, los socavones ya hacen acto de presencia y los conductores deben circular a mínima velocidad si no quieren dejarse las suspensiones en el intento de aparcar.
A esta situación se une la instalación de un cierre de barandilla en el pasillo peatonal, pegado al muro, que atraviesa la explanada y que permite comunicar la avenida do Rei con la calle Cardosas, lo que ha ocasionado las protestas de personas que hacen uso a diario de este paso, desde hace años. Ahora, deben atravesar por la zona de estacionamiento, con el consiguiente peligro y, además, la circulación por una zona de zahorra, que produce resbalones cuando llueve, frente al camino asfaltado por el que se circulaba hasta ahora.
En el registro municipal han entrado quejas de ciudadanos en este mismo año –y ya en 2015– solicitando que se arreglase el firme de ese pasillo al tratarse de una zona frecuentada por los habitantes de la zona alta de Ferrol para acceder a las estaciones de ferrocarril y al Ambulatorio. También se pedía que los automóviles no invadiesen ese espacio peatonal. Ahora, lejos de haberse solucionado el problema, los ciudadanos se han encontrado con que se han instalado barandillas a ambos extremos del pasillo, impidiendo la circulación peatonal. Algo que, como ya señalan algunos de los afectados, denunciarán también a través del registro municipal del Concello, al considerar que era un paso que existía desde hace años y que se utilizaba a diario. La circulación de peatones y de coches convivirá ahora en una explanada que, además, no reúne las condiciones esperadas de un aparcamiento público.
Párking
El estacionamiento se llena desde primeras horas de la mañana, pese a sus más de 300 plazas. Estas, sin embargo, son solo teóricas, ya que, al no estar señalizadas de ninguna manera, las filas comienzan a cruzarse a medida que avanza el día, con los consiguientes problemas, en algunos casos, de retirar los vehículos, que sobrepasan en muchas ocasiones el número adecuado de coches en el espacio.
La llegada de las lluvias puede convertir la explanada en lo que ha sucedido en años anteriores, donde los enormes baches, llenos de agua, hacían intransitable la zona. El Concello de Ferrol, que no es el propietario “oficial” del espacio, ya que está incluido en el convenio con el Ministerio de Defensa, ya ha ejecutado en años anteriores actuaciones de mejora en la zona, a través de la empresa de baches Mixturas. Sin embargo la utilización de zahorra compactada para esa zona no es una solución definitiva y cada año se repite el  mismo problema, sin que hasta el momento, se haya optado por una solución definitiva.
Los conductores que utilizan habitualmente este estacionamiento –que cuenta con señalización del Concello, aunque tampoco se encuentra en las mejores condiciones– se quejan a diario del estado en que se encuentra, cuando es una zona muy práctica para aparcar y dirigirse al centro, sin tener que introducir el vehículo en A Magdalena. También lamentan la continua incomodidad que supone la presencia de “gorrillas” en este aparcamiento.
Por eso, algunos optan por el aparcamiento de la calle Cardosas, también perteneciente al acuartelamiento pero que, sin embargo, se encuentra asfaltado y en el que sí se llevaron a cabo las obras de pintado de las plazas y ampliación del número de estacionamientos, con la retirada de algunos arbustos. l