El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, garantizó, tras el fin del bloqueo a las industrias lácteas y a la huelga de entregas, que su Gobierno estará “expectante” y vigilará que se cumpla el acuerdo lácteo. “Lo que vamos a plantear es que se cumpla en su contenido, alcance y efectos”, sentenció.
El mandatario gallego defendió que los ganaderos tuvieron el “apoyo” de su Gobierno “antes, durante la manifestación” y que lo seguirán teniendo “después”. Así, esgrimió que se trabajó por un acuerdo de “máximos legales” ahora pendiente de firma.
Destacó que es “la primera vez” que industria y distribución “se sientan en una mesa” delante de las cooperativas y ganaderos, y asumen varios compromisos: “no usar la leche como producto reclamo” en los hipermercados y grandes superficies, concretar su origen, fijar unos contratos tipo a partir de septiembre y “transparentar” la cadena de precios.
“Y además, con un plazo para hacer todo esto: diez días desde que se firme”, enfatizó, para concluir que también hay compromisos para “dictar reales decretos” en el ámbito de las competencias del Gobierno central y “que se publique en el Boletín Oficial del Estado”.
sensatez
“Nosotros estuvimos trabajando por el mejor acuerdo posible”, defendió, frente a “algún grupo político que trabajó por otras vías y objetivos”. Para él, los ganaderos dieron “una lección de sensatez y de sentido común gallego desde el primer instante”, al “percibir perfectamente cuando había interés por resolver problemas u otros intereses ajenos al sector lácteo”.
Mientras, la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, avanzó que el sector lácteo español firmará el próximo miércoles el acuerdo para atajar la crisis de precios que afecta principalmente a los ganaderos. Así lo anunció García Tejerina tras mantener un encuentro con representantes de Iberleche, la sociedad láctea que han conformado Capsa (Central Lechera Asturiana) y Leche Celta. La ministra señaló que están convocados “todos” a la rúbrica de este acuerdo, cuyo contenido se atiene, en líneas generales, al cerrado el jueves de la semana pasada, y que espera que la mayor parte del sector se adhiera al texto, ya que en la reunión de la semana pasada el consenso era “mayoritario”.
Aún quedan “flecos y detalles” por cerrar y, según la ministra, “el gran acuerdo” ya se alcanzó la semana pasada.
A su juicio, este paso se debe al “gran cambio” que, “sin ninguna duda”, ha dado la distribución y la industria, que “beneficiará al conjunto de los ganaderos”.
Por otro lado, la Plataforma en Defensa do Sector Lácteo amenazó con llevar a cabo acciones selectivas como bloqueos contra aquellas distribuidoras que se nieguen a subir precios de la leche.
Tras la decisión tomada el miércoles de poner fin al bloqueo a las industrias y a la huelga de entregas, ayer la plataforma avisó de que las movilizaciones seguirán contra distribuidoras, e incluso industrias, que se nieguen a llegar a acuerdos de precios sostenibles.
A la espera de que la próxima semana se firme en Madrid un acuerdo entre productores, industria y distribución para dotar de sostenibilidad a la cadena de valor, los ganaderos aseguraron que no dejarán las movilizaciones contra las empresas que no acepten acuerdos de revalorización. Distribuidoras como Mercadona y Vegalsa-Eroski han anunciado que subirán dos céntimos el litro de leche con el fin de que se repercuta en los productores.