No es tan fiero el león como lo pintan, o eso al menos es lo que pretende demostrar el Valdetires en el duelo que esta tarde, a las 18.00 horas en el pabellón de Esteiro, lo mide al UCAM Murcia. En juego, nada más y nada menos, que el ascenso de categoría en una eliminatoria a ida y vuelta que las departamentales ansían encauzar en Ferrol. Y, si no encauzar, sí al menos dejarla abierta para llegar con opciones a la confrontación de vuelta, que una semana después se dirimirá en tierras murcianas.
A priori y con los números en la mano, el UCAM es el peor de todos los contrincantes que al Valdetires le podría haber tocado en suerte. Y es que las murcianas cerraron la campaña regular sin haber perdido ni un solo partido, firmando unos registros que lo sitúan tanto como un equipo sólido atrás y que encaja pocos goles como una formación con facilidad para batir la meta rival.
Queru, entrenadora del cuadro ferrolano, pretende relativizar esos indicios convencida de que no será hasta que ambas formaciones salten a la cancha cuando puedan lucir y comparar su verdadero potencial.
A pesar de no contar con algunas jugadoras durante esa semana –Ale, por ejemplo, se perdió los dos últimos entrenamientos por unas molestias en un pie, aunque previsiblemente podrá jugar hoy–, el Valdetires ha trabajado intensamente, sobre todo en el apartado táctico, preparando una contienda en la que la primera dificultad a la que va a tener que hacer frente es la de superar la presión a la que previsiblemente su rival lo someterá. Tan importante como ello, mantener un buen tono defensivo, ser solidarias en las ayudas y, sobre todo, no perder la concentración.
Hace dos años, el Valdetires ya eliminó al equipo que continúa entrenando Alicia Morell. Aunque ambos se han renovado mucho desde entonces, en la entidad ferrolana esperan que el resultado sea el mismo. Para ello, es imprescindible encarrilar la eliminatoria en Ferrol y ello pasa por contar con el respaldo de sus aficionados en el pabellón de Esteiro.