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lunes | 6 mayo | 2024
La calle Pardo Bajo se convertirá por fin en un vial peatonal desde el punto de vista urbanístico, dejando atrás la imagen de una calle en la que conviven tráfico rodado y peatón, con calzada y aceras pese a que por esta calle ya no circulan vehículos desde que se cerró al tráfico de forma definitiva a mediados de abril del año pasado, una vez concluida la Semana Santa.
La peatonalización de la calle Pardo Bajo fue una decisión tomada por el anterior gobierno municipal y avalada desde la Policía Local, que señaló en su momento que este corte no afectaría notablemente al tráfico –como se ha confirmado desde entonces–, puesto que el vial ya permanecía cortado a la circulación de coches en épocas señaladas como Navidad, Semana Santa o verano, en la que se instalaban las terrazas de los muchos establecimientos de esta calle.
Sin embargo, una vez que se procedió a su peatonalización definitiva, que fue demandada mayoritariamente por los hosteleros de la zona, estos criticaron que el cierre al tráfico de una calle nada tenía que ver con la peatonalización, y ni el firme ni las aceras que se mantienen son propias de un vial para peatones y para el movimiento diario del sector de la hostelería.
Así las cosas, desde la Asociación de Hostalería se mantuvieron encuentros con el área de Urbanismo municipal para conocer las intenciones del ejecutivo, que ahora se ven plasmadas en la contratación de la redacción de un proyecto básico y de ejecución de las obras de reurbanización en la calle Pardo Bajo.
Este primer paso de cara a la adaptación del vial al uso que ya tiene, peatonal, contó con la presentación de tres ofertas, siendo la mejor valorada y, por tanto, adjudicataria de la actuación la presentada por el arquitecto Vicente Pintos Santiago.
El proyecto cuenta con un importe de contratación de 17.545 euros que servirá para dar forma a la idea de nueva calle peatonal, acorde con el entorno del barrio de A Magdalena, en el que se encuentra Pardo Bajo.
