El número de denuncias tramitadas por la Policía Local en Ferrol por no acatar las medidas de confinamiento volvió a dispararse durante el pasado miércoles, según informaron fuentes municipales. Un mes después de que se decretase el estado de alarma, el balance de infracciones diario se encuentra en niveles muy por debajo de los primeros días, lo que no evita que se den picos como el del día 15, con un total de diez nuevas infracciones, entre las que se encuentran dos personas que fueron descubiertas haciendo una fiesta con una tercera en un piso de Recimil u otras cuatro que fueron interceptadas viajando en un mismo vehículo.
El primero de los casos tuvo lugar pasadas las nueve de la noche en una vivienda del mencionado barrio. Al parecer, los agentes municipales se encontraban patrullando la zona cuando escucharon “gritos e portadas” procedentes del interior de un inmueble. Tras localizar el piso, que se encontraba con la puerta abierta, los agentes hallaron en su interior a tres personas cantando y propinando alaridos.
Uno de los descubiertos se identificó como el propietario del piso, mientras que los restantes, propuestos para sanción, aseguraron que se encontraban allí porque se aburrían en sus domicilios y que, por ello, acudían a diario a “cantar cos seus amigos”.
Viaje en grupo
La segunda sanción significativa de la jornada aconteció apenas una hora antes. En este caso, la Policía Local de Ferrol descubrió a cuatro personas que se encontraban circulando en un mismo turismo, un incumplimiento del artículo 36.6 de la Ley de Seguridad Ciudadana.
Según apuntó el Concello de Ferrol, estas personas aseguraron a los agentes que se encontraban camino del supermercado para comprar artículos “de primeira necesidade”. Además, uno de los infractores ya había sido denunciado en días anteriores.
Por último, desde el consistorio se informó también de una tercera actuación policial, en este caso sucedida el pasado martes en un supermercado de la calle Perbes, en el área del Ensanche. Según parece, se trató de un vecino de la zona que, al no poder acceder a un supermercado por estar cerrando y haber alcanzado en ese momento su aforo máximo, intentó colarse por el aparcamiento del mismo. Al ser sorprendido, el hombre comenzó a increpar al personal del mismo, lo que les obligó a avisar a los agentes.
Balance en la comarca
Además de las denuncias en Ferrol, las Policías Locales de As Pontes y Cedeira ofrecieron ayer un balance de sus actuaciones durante el primer mes del estado de alarma. En ambos casos, los agentes realizaron labores de vigilancia en colaboración con la Guardia Civil y la Policía Naval.
Así, en la villa pontesa se tramitaron 60 denuncias de un total de 152 controles, advirtiendo además que la mayoría de los casos se trata de personas reincidentes en lugar de un nutrido grupo ignorando las medidas de confinamiento. En el caso de Cedeira la situación resultó mucho menos volátil, aunque los agentes municipales advirtieron de que tienen constancia de algunos vecinos que aprovechan las excepciones en la Ley para incumplirla.