La CEOE aprobó ayer la entrada de Inditex como miembro de la junta directiva de la patronal, aunque no podrá optar a los órganos de gobierno, es decir, que no tendrá derechos políticos.

Según confirmaron fuentes de la patronal, la entrada de Inditex, ratificada por la junta directiva celebrada ayer antes de la asamblea, se suma a otras compañías que ya cuentan con miembros dentro de la junta directiva.

Una de las reclamaciones históricas de estas grandes empresas ha sido poder participar en los órganos de gobierno de la CEOE de forma directa, más allá de lo que pueden hacerlo mediante las asociaciones sectoriales de las que forman parte.

El año pasado, 26 compañías entraron a formar parte de la CEOE, según el balance de la patronal presentado durante la asamblea celebrada ayer.

Gobierno estable
Por su parte, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, subrayó la necesidad de que España cuente con un Gobierno estable aunque eso pase por repetir elecciones. Garamendi hizo estas declaraciones tras su primera asamblea como presidente de la patronal, en la que se aprobó duplicar el número de vicepresidencias, hasta diez, con el objetivo de elevar la presencia femenina en la organización.

Entre los nombres que han sonado en este sentido estaría el fichaje de la exministra de Trabajo Fátima Báñez como asesora de la patronal, y que Garamendi no quiso ni confirmar ni desmentir, y emplazó a después del verano.

“Ni confirmo ni desmiento. En septiembre lo decidiremos”, dijo en alusión también a las personas que ocuparán las nuevas vicepresidencias.

Aunque ya durante su discurso ante los miembros de la CEOE, Garamendi pidió a la clase política “responsabilidad, estabilidad y moderación”, fue en las posteriores declaraciones a los medios de comunicación cuando apuntó a la posibilidad de que de unas nuevas elecciones pudiera salir un Gobierno más estable.

“Si no hay capacidad de un acuerdo, si hay elecciones, las encuestas dicen que se aclararían más las cosas. Pues igual es mejor esperar a noviembre y tener un país más tranquilo que uno mas inestable a corto plazo”, dijo.

En la asamblea, Garamendi insistió en la necesidad de contar con un marco regulatorio estable y homogéneo para todas las empresas, también en sectores regulados como el eléctrico. “Que se equiparen exigencias a las empresas de sectores regulados con otras”, pidió Garamendi.

Registro horario
Asimismo, criticó la mala regulación “a base de reales decretos” en lugar de en el seno del diálogo social y puso como ejemplo el registro horario que, a su juicio, habría salido mejor desde una mesa de negociación entre patronal y sindicatos.

También expresó su preocupación por la fiscalidad “como otra forma de romper competitividad de las empresas”, y por el déficit publico y la falta de eficiencia en la Administración.