El grupo parlamentario del expresidente catalán Carles Puigdemont se aferra a la investidura a distancia de su líder antes del 14 de mayo, apuntalado en la reforma aprobada este viernes por el Parlament, pese a admitir sus escasas posibilidades de viabilidad y sin revelar una eventual candidatura alternativa.
“Somos conscientes de las dificultades de conseguirlo”, indicó el viceportavoz del Junts per Catalunya (JxCat), Eduard Pujol, al término de la reunión entre Puigdemont y sus diputados en Berlín, donde reside el expresidente de la Generaltitat a la espera de que la Justicia alemana decida sobre su extradición a España.
Pujol se refirió a lo que calificó de “obstinación” del Gobierno español, que le ha llevado a “impedir” sucesivos intentos de investir a Carles Puigdemont o al segundo de la lista, Jordi Sánchez, sin mencionar a Jordi Turull, en la cárcel al igual que el anterior por su participación en el ilegal proceso de independencia catalán del pasado año.

Recurso
Asimismo, admitió como “perfectamente previsible” que el Gobierno español formalice, como ha anunciado, un recurso ante el Tribunal Constitucional en contra de la reforma de la Ley de la Presidencia para posibilitar una investidura a distancia o telemática. Dijo que en el grupo existe el “respaldo absoluto” a seguir en esa vía y no plantear nuevas candidaturas hasta la fecha límite indicada, para mostrar su comprensión hacia la “decepción” que pueda causar esa falta de concreción. 
Entre los 28 diputados que viajaron a Berlín –del total de 34 escaños del grupo– estaba Elsa Artadi, quien estos días ha sonado como posible candidata a ser investida y quien antes de salir hacia la capital alemana declaró que en la reunión se trazaría la hoja de ruta para los próximos 15 días. En caso de que acabe “siendo imposible” lograr su elección “como legítimo presidente que es” dentro de ese plazo, prosiguió Pujol, se recuperaría la candidatura de Sánchez y, si tampoco esa resultara posible, se “abordaría” una alternativa. “No buscamos agotar los plazos ni ir a nuevas elecciones”, aseguró Pujol, ante la obligatoriedad de tener que convocar comicios anticipados, de no conseguirse una investidura el 22 de mayo. La reunión de ayer era la segunda del grupo de JxCat en Berlín desde la llegada de Puigdemont en esa ciudad, el 6 de abril, y la séptima, recordó Pujol, del total de las celebradas “fuera de Cataluña”, lo que según el viceportavoz del grupo es indicativo de la “anormalidad” en que se vive tras la activación del artículo 155.
“Nuestro propósito es resembrar para superar esta situación”, dijo Pujol, quien anunció que se orquestará un “plan de choque” para paliar los efectos del 155.
Esta reunión sigue al plenario del Parlament catalán de este viernes, en que se aprobó la reforma de la Ley de la Presidencia, con los votos del bloque independentista y el rechazo de los partidos constitucionalistas.
El Gobierno español tiene previsto recurrir la reforma ante el Constitucional, por lo que quedará en suspenso en cuanto el recurso sea admitido a trámite.