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jueves | 25 abril | 2024
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, afirmó ayer que en su reciente viaje a Cuba cumplió los objetivos marcados, principalmente con la emigración gallega, y defendió que también abrió “un camino de relación con el Gobierno cubano que quiere iniciar una senda de reformas, del modelo económico, productivo y empresarial”.
“Y van por el camino adecuado, es preciso hacer reformas en Cuba para que el bienestar del pueblo sea superior en los próximos años”, señaló en Santiago tras participar en un acto sobre la ruta xacobea.
Feijóo señaló que el objetivo “prioritario” era apoyar a los 40.000 gallegos en Cuba, “que lo están pasando en muchos casos de forma regular” y también estrechar los lazos culturales, con actuaciones como la de Milladoiro, ante dos mil personas.
Y también tenía un aspecto político, que era estar a disposición del Gobierno cubano, “que respondió con una inusitada intensidad” lo que propició varias peticiones de reuniones que Feijóo explicó que tuvo “el deber y la obligación y el honor de corresponder”.
Además de con Raúl Castro, se reunió con el primer vicepresidente del país, Miguel Díaz-Canel, y con los ministros de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, y de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez.
El titular de la Xunta recordó la importancia de las relaciones entre Cuba y España, ya que se trata del país más importante de la UE en relaciones económicas y empresariales con la isla y el tercero tras “China y Venezuela”.
Ante estas relaciones económicas, señaló que España “tiene que estar preparada para el momento en el que Cuba prosiga con las reformas económicas anunciadas por el Gobierno”.
Sobre las críticas de la oposición dijo que las respeta aunque desconoce en qué consisten e insistió en que acudió a la isla a cumplir sus compromisos como presidente gallego. “Admito cualquier acusación aunque sea sin fundamento”, concluyó.
el príncipe, embajador
Mientras, Feijóo anunció que el príncipe de Asturias será el primer embajador honorífico del Camino, un cargo vitalicio creado recientemente por la Xunta.
En un acto en Santiago para conmemorar el XX aniversario de la declaración de la ruta como Patrimonio de la Humanidad, Feijóo informó de que el príncipe había aceptado este ofrecimiento. “De su mano esta ruta volverá a actuar como factor de comprensión, de acercamiento de todos los pueblos del mundo. De su mano el nombre de Galicia llegará más lejos y se volverán a encontrar en el camino gentes diversas con un único vínculo, el de la fraternidad”, señaló.
