El juez de lo Contencioso Administrativo de Ferrol, Cristóbal Pintado González, acaba de dictar una sentencia desestimando el recurso interpuesto por el vecino de Neda José Manuel Ruiz Pavón contra sendos acuerdos del Concello por los que se concedió a la entidad Motor 2000, Chapa y Pintura SL, la legalización de un taller de reparación de vehículos y la licencia de actividad del mismo.
El demandante solicitaba la nulidad de dichos acuerdos municipales, bajo el argumento de que la actividad del mencionado taller, situado en el bajo de su vivienda, en la avenida de Castelao de Neda, genera unos olores, gases y ruidos insoportables.
El juzgador sostiene que el examen del expediente administrativo muestra, al menos formalmente, que todos los informes son correctos y se ha aplicado la normativa vigente. Añade que la prueba practicada en autos desvela el cumplimiento por parte del taller de las condiciones legalizatorias en su día establecidas.
En este sentido, el juez Cristóbal Pintado señala que, al igual que la documentación elaborada por los técnicos municipales, el informe emitido por un perito designado judicialmente recoge que el taller se ajusta a los requerimientos contenidos en las ordenanzas del Concello de Neda. Precisa que, tras una medición del nivel de concentración de compuestos orgánicos volátiles en el domicilio del recurrente en pleno desarrollo normal de la actividad del taller e incluso en condiciones desfavorables –las ventanas abiertas y viento– “puede afirmarse que dicho nivel se encuentra por debajo del valor máximo para considerarlo como olor significativo.
En cuanto a la contaminación acústica, en la sentencia se recoge que el perito judicial detectó un mínimo exceso en condiciones de máximo ruido –36,5 decibelios, frente a los 35 del nivel máximo permitido–, cuestión que se podría subsanar aislando la zona de la cabina de pintura. A este respecto, el juez precisa que si los niveles permitidos son traspasados por el propietario del taller los vecinos afectados siempre tendrán la posibilidad de denunciarlo, pero eso no implica la enervación de las licencias.