Los aficionados al deporte de la comarca tendrán que elegir el sábado entre ir a ver el encuentro del grupo 1 de Tercera de fútbol que disputa el Racing, en el campo de A Malata, a las 18.00 horas, ante el Porriño Industrial, y el de Primera División de fútbol sala que dirime O Parrulo Ferrol, en el pabellón de A Malata, a las 18.15 horas, frente al Peñíscola.

En el caso del cuadro verde, el hecho de que el domingo por la mañana se vayan a disputar casi todos los partidos de la División de Honor juvenil ha llevado a que se decidiera adelantar un día el encuentro del primer equipo.

La explicación que se da desde el club es que, ante las numerosas bajas que sufre el equipo –porque solo hay trece futbolistas del primer equipo disponibles–, se tiene que convocar a tres juveniles para completar el banquillo. Por ello, el sábado lo pueden hacer para estar a las órdenes de Manel Fernández en el encuentro que la escuadra ferrolana juega en el campo del Alondras.

Por contra, si esos futbolistas jugasen el domingo por la mañana y el primer equipo disputase su partido por la tarde no podrían ser citados por el preparador Emilio Larraz, lo que conllevó la solicitud del cambio de día, algo a lo que el Porriño no puso impedimento, por lo que el choque quedó fijado para el sábado a las 18.00 horas en A Malata.

En cuanto a O Parrulo, la Liga Nacional de Fútbol Sala había solicitado al equipo ferrolano que, para ser televisado, su encuentro se jugase el sábado, a partir de las 16.15 horas, con el montaje de la habitual pista azul.

Sin embargo, los dirigentes de la entidad departamental rechazaron la opción de que el choque se jugase con el montaje de la pista azul, porque eso conllevaría más de un día de inutilización del recinto de A Malata, lo que impediría que los equipos del club que disputan las competiciones autonómicas pudieran disputar sus partidos, ya que el resto de pabellones están ocupados.

Por ese motivo, desde la directiva de O Parrulo se le solicitó a la Liga Nacional de Fútbol Sala la opción de dirimirse ese encuentro, en el horario habitual, a las 19.30 horas, pero sin el montaje de la pista azul.
Pero el organismo que dirige el fútbol sala nacional no avisó al cuadro castellonense de que el encuentro no se podía disputar a las 16.15 horas, lo que conllevó que el Peñíscola, que ya había sacado los billetes de avión de vuelta para última hora del sábado, avisase de los perdería en el caso de que el choque fuese a las siete y media de la tarde.

Por ello, desde el club levantino se solicitó la opción de adelantar la hora a las 18.15 horas a lo que O Parrulo accedió ya hace algunos días, por lo que ya se sabía ese adelanto de hora. Ayer a sus dirigentes les extrañó la coincidencia del encuentro con el del Racing, aunque a estas alturas ya no podían hacer nada para evitar la coincidencia.

Por ello, ahora serán los aficionados los que tengan que decidir a cuál de los dos encuentros acuden, porque hay que tener en cuenta que hay bastantes aficionados que son abonados de las dos entidades.

Muchos de esos seguidores no entendían ayer esos horarios y, una vez dadas las explicaciones por parte de los dos clubes, les tocará decidir si fútbol o fútbol sala.