El recuento final de papeletas de las elecciones autonómicas del pasado domingo otorga a los políticos populares de Ferrol un plus que refuerza el peso que, en los últimos meses, han ido adquiriendo con mayor intensidad los representantes locales en el marco del PPdeG.
Los conservadores no solo han logrado más votos en los últimos comicios que los celebrados en 2012 sino que de los resultados trasciende que a su favor ha jugado también la mayor representación ferrolana alcanzada nunca antes en los populares. Al nombramiento del exalcalde José Manuel Rey Varela como conselleiro de Política Social –una de los departamentos estrella de este último periodo del gobierno de Feijóo– se han sumado consecutivamente el ascenso de Diego Calvo a la secretaría general de la formación en la provincia, pero también la vertiginosa llegada de Miguel Tellado al primer plano de la responsabilidad orgánica del partido.
Con los resultados sobre la mesa es fácil extrapolarlos a lo que hoy obtendrían unas formaciones u otras en el plano municipal. El PP ha recuperado buena parte de los votos perdidos en 2015 en el espectro local, pero hoy volvería a situar en sus manos con toda seguridad el gobierno en solitario de la ciudad naval, cuyo único precedente en la reciente historia democrática lo ha constituido precisamente Rey Varela.
Pero es en las siguientes fuerzas en donde se producen más variaciones. Si en 2012, el PSOE de Beatriz Sestayo –entonces candidata a parlamentaria– reafirmaba su tradicional segunda posición en la ciudad, aunque fuese por una solitaria papeleta de diferencia (7.014 frente a 7.013 de AGE), la distancia actual (6.051 votos frente a 8.177 de En Marea) refleja un panorama agotado para los socialistas ante el empuje de sus más directos rivales a la izquierda a costa de que estos no solo capitaneasen la oposición municipal sino de que también absorban más electorado procedente de las filas del otrora uno de los partidos de referencia en este ámbito geográfico.
La caída de los socialistas es generalizada en todas las ciudades, incluida la del feudo de Abel Caballero, a costa de En Marea, pero los números reflejan en la comarca que, allí donde el PSOE accedió a la Alcaldía en 2015, sus respectivos representantes han sido capaces de mantener el pulso liderado por Luis Villares. Así sucede, sin ir más lejos, en municipios como Neda y Valdoviño, en donde el PSOE continúa siendo la lista más votada y, también por extrapolación, con mayores garantías de volver a conformar un gobierno de izquierdas allí donde hasta el pasado año había sido el PP su responsable.
Caso aparte lo constituye As Pontes, en donde Valentín González no tiene rival.