El Puerto de Ferrol ha pasado en poco años de luchar por recibir media docena de cruceros a intentar superar la veintena. Curuxeiras se ha hecho un hueco entre los principales destinos de las más importantes navieras.
La posición estratégica de la ciudad en las rutas europeas y el trabajo del departamento comercial explican gran parte de este crecimiento. 

¿Cuál es la perspectiva de escalas qué tienen en el Puerto para esta temporada de cruceros? 
Cada temporada va fluctuando, pero llevamos unos años rondado la veintena de buques y nuestra intención es mantener esa cifra. Es cierto que a principio de año hemos tenido varias cancelaciones por los temporales en el mar, pero intentaremos mantener el ritmo de los últimos años
 
A Ferrol ya no se le hace extraño ver cruceros atracados en Curuxeiras ni turistas por las calles, ¿qué valor añadido tiene el tráfico de pasajeros? 
El tráfico de cruceros es fundamentalmente importante para el destino, más que para el puerto. Los cruceros van a un destino. En este caso, el Puerto un eslabón para dar cabida a otros sectores, como puede ser el turismo, el comercio, la hostelería. Esa es la mayor relevancia de nuestro papel, que canalizamos esa actividad hacia la ciudad.

Algunas navieras venden este destino como Ferrol/Santiago, ¿creen que eso perjudica que la gente se quede en la ciudad? 
Tenemos la suerte de tener en Galicia un icono mundial, una marca internacional como es Santiago de Compostela, un polo de atracción para cualquier naviera, pare en el puerto que pare. 
Aún así, el porcentaje de turistas que se marchan o hace excursiones y no se quedan en Ferrol es pequeño, en torno al 20%. La mayoría prefiere disfrutar del centro, de los arsenales, de los museos o del entorno si el tiempo lo permite.

¿Considera que la fachada portuaria es atractiva para los turistas? 
Me parece una fachada extraordinaria y un buen lugar de atraque para los buques. En pleno Ferrol Vello, un barrio histórico, y en el corazón de la ciudad. No en todos los destinos tienes el centro histórico a unos minutos caminando. Eso es una gran ventaja. 
Además está el arsenal militar flanqueando la entrada al puerto y también tenemos el kilómetro cero del Camino Inglés. Todo se puede mejorar, pero tenemos muchos elementos juntos y muy atractivos.

¿Qué trabaja realizan desde el departamento comercial para conseguir estas escalas? 
El trabajo es continuo. Acudimos a las principales ferias del sector, como son la Seatrade Cruise Global o la Seatrade Europe, casi siempre de la mano de Puertos del Estado. Además tenemos contacto directo con las navieras y con los turoperadores. También formamos parte de asociaciones para el fomento del turismo marítimo.

Ya tienen confirmados cruceros para la próxima temporada. ¿Se esperan nuevos clientes? 
Estamos en ello. Algunas navieras te dan las previsiones a meses o a un año vista. Pero siempre estamos trabajando y ahora mismo tenemos margen de crecimiento. 
Ferrol está en una ubicación privilegiada entre el mar Báltico y el Mediterráneo, por lo que es un lugar clave para hacer escala en casi cualquier itinerario. Tenemos un buen ratio de navieras que repiten y eso manda un mensaje a otras que todavía no se han decidido. Porque el primer paso siempre es el más complicado. Aún así, hemos tocado muchos palos, quedan pocas que no hayan venido, pero seguro que habrá alguna buena noticia.