“Eternamente no meu corazón porque te levo gravado/a na miña alma’. En memoria de todos os bebés que morreron durante a xestación, o parto ou ao pouco de nacer”. Así reza desde ayer la placa instalada bajo un tejo plantado en el cementerio municipal de Narón al que, a partir de ahora, las familias que hayan sufrido una muerte gestacional o perinatal podrán acudir para recordar a sus hijos.
Esta es la forma en la que el Concello de Narón y la asociación Bolboretas no Ceo Norte rendía ayer, Día Mundial de Concienciación de la muerte gestacional y perinatal, homenaje a las familias que la hayan padecido y que podrán dejar grabados en piedras el nombre de sus hijos a los pies de este árbol. “Á gravidade de ter que vivir un duelo moi difícil nestes casos, quizáis imposible de superar pero co que deben convivir, súmase a incomprensión da sociedade en moitas ocasións con este tipo de traxedias”, indicaba la alcaldesa de Narón, Marián Ferreiro, presente en el acto.