Con la medalla de plata ya en el bolsillo –el mejor resultado del combinado nacional de baloncesto adaptado en su historia–, la selección española del naronés David Mouriz afrontó la final de los Juegos Paralímpicos de Río con todo por ganar e intentar seguir poniendo galones a su ya brillante historial. Y a punto estuvo de sorprender a la siempre favorita selección estadounidense en la pista del Olympic Arena de Río.
El conjunto español se cargó el juego a sus espaldas en los primeros minutos de la final paralímpica, unos compases iniciales en los que tanto españoles como norteamericanos enfocaban su táctica en el aspecto defensivo, lo que dejó un primer parcial de 8-12, con ventaja para los estadounidenses. En el segundo cuarto, la igualdad pudo verse de nuevo en lo elástico del marcador, con la entrada de Turek –excompañero de Mouriz en el Bidaideak Bilbao BSR–, que daba aire a los suyos, y con el acierto de Ruiz y Alejandro Zarzuela para el conjunto nacional.
Los estadounidenses aumentaron su renta hasta los seis puntos para marcharse al descanso 23-29 y con todo por decidir en la segunda mitad de esta final paralímpica.
final
El conjunto de Mouriz tuvo que replantear su estrategia tras el inicio rutilante de su rival en este segundo tiempo. Un parcial de 0-6 que obligó a Artacho a pedir un tiempo muerto para seguir luchando por el oro. La estrategia funcionó y España volvió a seguir el rastro de un equipo norteamericano, al que sendos triples de Williams volvieron a dar aire. Con cinco puntos de renta al inicio del último cuarto, el equipo del naronés vio cómo su rival disputaba los mejores minutos del encuentro e impedía una más que posible remontada española. En el último minuto, Artacho dio cancha a los menos habituales para que todos pudiesen saborear la plata paralímpica en el Olympic Arena, una medalla que hace historia con el naronés Mouriz en ella.