“Esta vida va de reinventarse o morir”. Así de contundente se muestra el artista ferrolano Alberto “Al” Vila, que recientemente ha puesto en marcha una interesante iniciativa con la que ofrece su música mediante pedidos de comida a domicilio. Se trata, pues, de una doble campaña, dado que por una parte da su apoyo al sector de la hostelería y, por otra, brinda visibilidad al mundo de la cultura, uno de los grandes afectados por el coronavirus.
El funcionamiento es sencillo: al realizar un pedido, el embalaje del mismo –o la bolsa, según el caso– incorpora un código QR que, al ser escaneado, dirige al usuario a la mencionada canción. “Esto es algo completamente gratuito”, apunta Vila, señalando que ni él ni los locales se beneficiarán de la iniciativa dada la cantidad de nuevas reproducciones que debería tener la canción para generar dinero. “El rollo es darte a conocer y saber que seguimos aquí”, sentencia.
La idea, explica el artista, la tuvo en un principio Javier Serén, gerente de bar Dotmas, en Lugo, y amigo de Vila, que comenzó a incluir uno de estos códigos en sus pedidos con su propia lista de reproducción “para que sus clientes estuviesen como en su local”. La idea tuvo una gran acogida, así que la idea evolucionó, incluyendo en un principio canciones de Vila –de momento se ofrece el nuevo “single” del artista, “... y ocurrió”, aunque no se descarta incorporar obras de otros profesionales–.
El apoyo a la iniciativa desde su concepción no ha dejado de aumentar, pasando de tener dos locales participantes en la comarca –Boss en Ferrol y el Mesón de Pepe en As Pontes– a incorporarse desde la pasada semana la plataforma Lookeats –con 37 locales asociados en Ferrol– y el ya clásico restaurante Zahara en los próximos días.
Y es que, como señala el propio Vila “hay mucha gente que vive de la hostelería”, incluida la cultura, a la que el artista considera una de las muchas “patas” del sector “y al final si una falla, detrás vamos todos”, por lo que considera imprescindible esta clase de iniciativas.