De esos 123 conductores, 96 fueron denunciados administrativamente por superar la tasa de alcoholemia y otros cuatro por conducir bajo efectos de estupefacientes, mientras que los 23 restantes fueron investigados por delitos contra la Seguridad del Tráfico, seis de ellos tras sufrir un accidente y otros dos por negarse a someterse a la prueba pertinente.
Los quince conductores restantes, que superaron la tasa de 0,60 miligramos de alcohol por litro de sangre, fueron citados a comparecer en el Juzgado competente por el procedimiento de Juicio Rápido.
La Guardia Civil estableció más de cien puntos de verificación en la provincia de A Coruña, en los que también se intervino a doce conductores por circular sin tener el permiso de conducción retirado.
El 2 de marzo fue detenido un individuo en Boiro (A Coruña) que tenía en vigor una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión de un Juzgado de lo Penal de A Coruña por una sentencia firme por haber conducido previamente sin permiso ni licencia.
El 5 de marzo, un conductor dio positivo en alcoholemia en la AC-12 (A Coruña-San Pedro de Nós) al sobrepasar los 0,60 miligramos de alcohol por litro de sangre y, al comprobar sus datos, la Guardia Civil constató que carecía de permiso de conducción y que sobre él pesaba una orden de búsqueda y detención para personarse en el juzgado.
La Guardia Civil también ha añadido que durante estos días no hubo que lamentar accidentes graves, a excepción de uno registrado en la noche del 3 de marzo alrededor de las 23.40 horas, cuando se produjo un atropello a tres peatones en una pista en el término municipal de Padrón.
Uno de ellos resultó herido grave, otro leve y el tercero salió ileso, mientras que el conductor del vehículo dio positivo en alcohol y en tres tipos de drogas; el equipo de atestados todavía está investigando las causas y las circunstancias del atropello.