La apuesta y la oposición por la peatonalización del centro de la ciudad fue protagonista durante el mandato pasado y, si bien no se consiguió en su totalidad, sí se dieron importantes avances que se tradujeron en el cierre total al tráfico de la calle Real hasta Amboage –con dos tramos nuevos para peatones en el pasado cuatrienio–, la peatonalización de la zona del Cantón y los más recientes cortes definitivos de las calles Pardo Bajo y María.
Ahora, desde el pasado fin de semana, se suma a estos tramos peatonales parte de la calle Magdalena, que como viene siendo habitual en la temporada estival se cierra al tráfico para favorecer la instalación de terrazas.
1 El polémico cierre de un tramo de la calle Real
En el año 2015 comenzó el mandato de Jorge Suárez y también los inicios de la peatonalización, que en el pasado mandato fue objeto de continua polémica. La calle Real, que se heredó peatonal en su mayor parte, completó en el mandato de Suárez su total corte al tráfico. Primero fue, ya en 2015, el cierre total a la circulación del tramo más próximo a Amboage que ya era peatonal la mayoría del día y solo permitía la circulación por la noche, hasta las 11.00 horas. Pese a que el cambio no parecía muy rotundo, la polémica fue mayúscula con el sector del comercio. Menos repercusión tuvo ya el último tramo de este vial cortado al tráfico, el frontal de la plaza de Armas, debido a que coincidió con la proximidad del inicio de las obras.
2 El Cantón y la Alameda, libres de coches
Tampoco la peatonalización de la zona del Cantón estuvo exenta de polémica. La Alameda dees hoy zona de disfrute para el peatón pero comenzó el pasado mandato como aparcamiento. La oposición del sector de la hostelería a la prohibición de circulación rodada en la zona, con recogida de firmas por parte de los establecimientos del Cantón no impidió que el ejecutivo de Jorge Suárez continuase adelante con su iniciativa y esta zona se ha convertido en espacio peatonal con terrazas.
3 Pardo Bajo y María
Las últimas incorporaciones a la peatonalización antes de acabar el pasado mandato se produjeron tras la celebración de la Semana Santa. Aprovechando el cierre de la calle Pardo Bajo y María al tráfico con motivo de la temporada de terrazas, se dejaron cerrados esos viales para continuar en el avance de la peatonalización.
Aunque en estos casos, los hosteleros se mostraron mayoritariamente de acuerdo con la medida, que ya habían reclamado en anteriores ocasiones, apuestan por una peatonalización “en serio”, es decir, que no se limite a un corte de tráfico sino a una adecuación de los viales ala circulación peatonal y no a la rodada como está actualmente.
Además, los permisos para terrazas desde Semana Santa a verano no se tramitaron en la calle Pardo Bajo, por lo que ha estado cerrada al tráfico pero, sin embargo, en las últimas semanas no ha tenido tampoco actividad de hostelería en la calle.
4 Calle Magdalena
Con la llegada de la temporada estival, la calle Magdalena se suma a la peatonalización con el corte al tráfico para la instalación de terrazas de hostelería.
Desde el pasado fin de semana, además de las mesas y sillas de Pardo Bajo y María se suman las de la Magdalena, que podrán permanecer montadas hasta finales de septiembre y que ya han ocasionado algunas quejas vecinales que apuntan a que apenas hay establecimientos en algunos tramos y sin embargo no se deja circular.
La calle Magdalena volverá a tener tráfico desde el 30 de septiembre, mientras que Pardo Bajo y María seguirán peatonales.