El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha ofrecido al PSOE formar un gobierno de coalición siempre que esté liderado por el PP: “Es lo único que es viable hoy”, aseguró después de que el viernes se evidenciara que el pacto PSOE-C’s-Podemos está lejos de ser una realidad.

Lo dijo ayer en la convención del PP celebrada en Barcelona con el título “Pacto por el fortalecimiento institucional”, donde avisó al PSOE de que esta coalición es el único escenario para evitar elecciones: “La propuesta que está en vigor es la del PP, y, si quiere, estamos dispuestos a hablar de la misma”.

Rajoy estaría “encantado” si C’s quiere entrar en este pacto pero recordó que, si hubiera acuerdo PP-PSOE, los votos del partido de Albert Rivera serían innecesarios para que cristalizara una investidura.

cinco pilares

El líder popular reivindica que es la misma propuesta que lanzó al día siguiente de las elecciones, y lamentó que los socialistas insistan en no atenderla, cuando 15 de los 28 países de la UE tienen pactos similares.

Rajoy admitió que socialistas y populares discrepan en “muchas cosas”, pero comparten cinco pilares donde sustentar un gobierno: la unidad de España, la soberanía nacional, la igualdad de los españoles, el proyecto europeo y la lucha contra el terrorismo.

Citó las que para él serían las bondades de este gran acuerdo: tendría una mayoría clara tanto en el Congreso como en el Senado que permitiría una “gobierno estable para hacer reformas consensuadas por mucho tiempo”, y daría un buen mensaje a los agentes económicos y sociales.

“Lo que de verdad necesita España es un gobierno que pueda gobernar, que tenga un mínimo de cohesión en su ideario, que sea capaz de acordar medidas, un gobierno estable que genere confianza dentro y fuera de España”, según el presidente, que ve posible hacerlo con el PSOE.

También apeló al escenario político europeo para convencer a los socialistas: recordó que Angela Merkel gobierna en Alemania con los socialdemócratas, mientras que en Austria hay un pacto similar pero al revés –gobiernan los socialistas–.

Rajoy sí ve una premisa básica: que debe gobernar la fuerza más votada, y recordó que el PP tiene “33 diputados” más que el PSOE, 123 por 90.