Cara y cruz para la selección española de baloncesto, de la que forma parte el naronés David Mouriz, en la segunda y tercera jornada de los Juegos Parlímpicos de Río. El cuadro nacional sumó ante Japón su segunda victoria –había ganado en la sesión inaugural a Canadá–, pero no pudo repetir ante Turquía, uno de los adversarios más potentes de su grupo. A pesar de ello, incluso en este traspié, el equipo que dirige Artacho dejó una buena imagen que invita a seguir considerándolo como un candidato a luchar por las medallas.
El duelo ante Japón resultó especialmente bueno para un David Mouriz que, con veinte puntos, se convirtió en el máximo anotador de España, además del jugador más valorado del partido. Su acierto desde el perímetro fue determinante para “abrir” una contienda que en los primeros cuartos resultó muy trabada.
Así, en los compases iniciales, las defensas fueron más rotundas que los ataques y a ambos equipos les costó anotar, como demuestra el hecho de que a los cinco minutos el marcador reflejase un exiguo 2-1. “La roja” tuvo especiales problemas para finalizar sus ataques aunque, poco a poco, fue entonando y, ya en el segundo período, tomó la delantera para llegar al descanso con una ventaja mínima de tres puntos.
Fue en el tercer cuarto cuando España vivió sus mejores minutos de la mano de un David Mouriz muy acertado en el tiro exterior. Esta circunstancia, unida a un mejor ritmo de ataque y más precisión a la hora de finalizar las transiciones rápidas permitió a España despegarse de forma definitiva en el marcador y no pasar apuros hasta el definitivo 39-55.
El duelo ante Turquía se preveía más complicado y así sucedió. La selección cayó finalmente derrotada (65-68) en un partido muy igualado durante los cuarenta minutos. El equipo de Artacho supo controlar a un oponente en el que, sin embargo, la figura de Gurbulak, con 39 puntos, se erigió como salvador.
Ninguna formación fue capaz de romper el marcador y, así, los minutos fueron cayendo con alternativas y ventajas mínimas para uno y otro equipo. España dominaba de un punto a falta de diez minutos, pero un parcial de 2-10 dio a Turquía la iniciativa e hizo temer que los otomanos sellasen su triunfo por la vía rápida. El combinado nacional supo reaccionar y con dos tiros libres de Pablo Zarzuela se puso por delante, pero el acertadísimo Gurbulak “clavó” un triple que acabó con las opciones españolas a pesar de que el propio Mouriz intentó contrarrestarlo con otro lanzamiento de tres.
La potente Australia, líder del grupo, espera esta tarde –14.30 horas– al equipo nacional.