Hasta los octavos de final del cuadro individual de la modalidad de arco recurvo llegó la presencia individual de Daniel Castro en la Universiada de verano, que se está celebrando en la localidad italiana de Nápoles. La vigésimo tercera posición en la que el arquero pontés acabó en el “round” clasificatorio le permitió quedar exento de la primera eliminatoria, así que su debut llegó en la segunda –en la que compitieron los últimos 48 arqueros que aún quedaban en liza–.

El checo Hlahulek, cuadragésimo segundo en el “round”, fue la primera víctima del competidor de Ferrolterra. El resultado de 7-3 con el que se saldó el encuentro fue el producto de cinco sets en los que, tras el empate (25-25) del primero, Castro se impuso en los dos siguientes (27-25 y 27-24). A pesar de que el competidor centroeuropeo redujo distancias tras vencer en el cuarto (24-27), el de As Pontes se impuso en el quinto y definitivo parcial por 28-27.

El nivel de exigencia subió en la ronda de dieciseisavos de final, en la que Castro se enfrentó al alemán Breitbach, décimo en la primera fase de la competición. Y, a pesar de que el empate y la victoria con las que Castro saldó las primeras mangas (26-26 y 27-25), su rival reaccionó en las dos siguientes para situarse a un solo punto de pase gracias a sus triunfos (28-29 y 26-27). El arquero pontés, sin embargo, reaccionó en la quinta entrada y, gracias a su triunfo parcial (28-24), mandó el encuentro a la flecha de desempate, tanda en la que los dos competidores lograron nueve puntos, aunque la flecha del de Ferrolterra quedó más cerca del centro.

La dificultad, en teoría, subió en octavos de final, ronda en la que el rival del arquero de As Pontes fue el chino Qi –séptimo en el “round”–. Este demostró su nivel en la primera tanda con su victoria (29-26) pero su rival le dio la vuelta al marcador al imponerse en los dos siguientes (23-26 y 25-26). El triunfo del competidor asiático en el cuarto set (26-25) mandó el encuentro a un quinto que se resolvió con empate (28-28). Así que nuevamente fue el desempate el que decidió qué deportista pasaba a los cuartos de final y esta vez, a pesar de los dos competidores consiguieron nueve puntos, la flecha de Qi quedó más cerca del centro para darle el pase