Si por algo se caracterizaron los plenos de este mandato fue por su duración y por la presencia en todos ellos de varios temas recurrentes. La última sesión que trató cuestiones para su aprobación, más allá del que resta en este cuatrienio para el visto bueno del acta del celebrado ayer, quiso romper con esa tónica e incluso marcar nuevos récords, aunque en este caso el de la brevedad.

Con tres puntos para aprobación y cuatro para dar cuenta de resoluciones, el pleno se liquidó en unos cuatro minutos, a los que hubo que añadir los diez que se le concedieron –ya casi de forma habitual– a Manuel Zebral en el marco de las intervenciones de la ciudadanía, bajo petición previa.
El pleno se limitó a la lectura por parte del alcalde, Jorge Suárez, de los puntos incluidos en el orden del día y, tras no haber ni una sola intervención de los portavoces municipales –estaba ausente la socialista, Beatriz Sestayo– ni de la edil no adscrita Esther Leira, se aprobaron aquellos que requerían de ese requisito. Eso sí, ninguno por unanimidad, ya que las facturas contaron con la abstención de la mayor parte de la oposición.

Lo que sí se cumplió en esta sesión fue precisamente el ritual de tener que dar el visto bueno a reconocimientos extrajudiciales de crédito, toda vez que un amplio número de servicios no disponen de contrato en vigor. En este caso, fueron las facturas de la Oficina de Rehabilitación Municipal y la limpieza de playas de la que se hace cargo Urbaser las que pasaron por el trámite necesario de aprobación para su pago.

El regidor se despidió recordando que el pleno de ayer no es el último del actual mandato, ya que se celebrará otro el próximo día 12, para la aprobación de las actas de esta sesión y en el que se producirán las despedidas.

En este caso, un total de 15 ediles abandonarán sus escaños para dejar paso a los nuevos concejales que ocuparán sus asientos. Son cinco del actual gobierno–tres de FeC y dos ediles no adscritas que en su día formaron parte del grupo socialista–, dos del PSOE, uno del BNG, una no adscrita –que perteneció a FeC  al inicio del mandato–,  la única edil de Ciudadanos y cinco concejales de la bancada de los populares.