Es metereólogo y también un gran comunicador. Una combinación perfecta para hacer llegar de la mejor manera posible al público toda la información relacionada con un tema que, constatado está, suscita un gran interés en la sociedad: las previsiones meteorológicas. El “hombre del tiempo” de la TVE –actualmente en Madrid a cargo del matinal y los desayunos y también en el territorial de Galicia–, que primero lo fue en la cadena pública de su tierra natal, TVG, estará hoy en Ferrol –Centro Herrerías, en el Cantón, a partir de las 19.30 horas– para impartir la conferencia “Cambio climático: de la catástrofe al desencanto”, en la Cátedra Jorge Juan.
¿Qué nos contará en su intervención de esta tarde?
Abordaré no solo información y datos relativos al cambio climático, sino también en cómo se tratan a nivel mediático. Tras la cumbre de Kioto hubo una eclosión muy fuerte, se habló muchísimo del tema, y hay algunos científicos que creen que el hecho de que se tratase así es lo que luego tuvo como consecuencia la pérdida de interés.
¿A qué cree que se debió esto?
Muchos científicos dicen que el enfocar el tema desde un punto de vista catastrofista genera desencanto en la población, creyendo que no pueden hacer nada para solucionarlo. En términos generales se notó un desencanto. También hay gente que atribuye este descenso de interés a otros motivos como la crisis económica, que tomó el protagonismo.
¿Y ahora?
Ahora ha habido otro repunte, pero no tan fuerte como el que hubo en Kioto. Cada vez hay más evidencias de que el cambio climático es real y está provocado por la influencia humana en la tierra, y como cada vez es más evidente, ya no tiene mucho sentido eludir el tema, y por tanto ahora se mantiene la información de una manera más constante.
¿Cómo cree usted que hay que abordar este problema?
La labor de los medios de comunicación ha sido crucial a la hora de difundir el tema, pero el problema que veo es que se ha tratado desde un punto de vista un poco catastrofista. A ver, está claro que son malas noticias, no nos vamos a engañar. Si lo tratamos desde un punto de vista supercatastrofista, lo que sucede, según los psicólogos, es que la gente cree que no puede hacer nada, que se sienten incapaces de ayudar a solucionar el problema.
¿Y cómo se podría enfocar?
Pues hay otros científicos que lo enfocan desde un punto de vista que a mí me interesa mucho más y me parece mucho más inteligente y es enfrentarnos al cambio climático como una de los retos, en lugar de problemas. Sé que puede sonar un poco demagógico pero si lo enfocamos como un reto puede ser más motivador para la gente y el participar en alcancar un reto, intentar aplacar y mitigar el cambio climático, puede concienciar un poco más a la gente.
¿Está la población concienciada sobre la poblemática del cambio climático?
Sí hay mucha gente concienciada, que sí ya hace muchas cosas en su día a día para contribuir a ese cambio de paradigma, de forma de enfrentarnos al mundo, no tan consumista y no tan destructivo, pero también es cierto que gran parte de la sociedad lo sigue viendo como un problema muy lejano y cree que no se puede ser útil. Además de las acciones de los individuos, hay también una parte crucial que son las emisiones industriales, y luego están los gobiernos, con sus ideas de crecimiento, etc., pero como sociedad debemos de exigirles a nuestros gobernantes que tomen cartas en el asunto. Esta es la parte también crucial, votemos a quien votemos, elijamos a quien elijamos debemos exigir que solucione el problema o ayude a solucionarlo.
¿Qué fenómenos metereológicos son atrubuíbles ya al cambio climático?
La comunidad científica, de forma unánime, ratifica el hecho de que ya se ha observado una subida de temperaturas y del nivel del mar. Eso ya es evidente que se está observando, y una de las consecuencias que se preveían en los primeros escenarios y que se habían pronosticado era la aparición cada vez con mayor frecuencia de eventos extremos. Entiéndanse estos como tormentas fuertes, olas de calor intesnas, olas de frío intensas… extremos en distintos lugares del mundo, que estos iban a ser más frecuentes.
¿Y está siendo así?
Esta es una de la cosas que ya se está certificando como cierta. Es muy importante que algo que ya se estaba pronosticado se esté dando por hecho que ya es real.
¿A qué cree que se debe el interés cada vez mayor por las informaciones meteorológicas?
La gente cada vez tiene mayor acceso a esa información; cada vez hay más tiempo dedicado al tiempo en los medios de comunicación; y la gente quiere usar su tiempo libre, de ocio, de la manera que le dé un rendimiento mayor, y para eso muchas veces el tiempo es crucial.
Algo tendrán que ver también ustedes, los presentadores...
Creo que los meteorólogos comunicamos mejor, llegamos con espacios más amenos, empatizamos más con lo que la gente quiere saber. La gente se fía más de nuestros pronósticos, los entiende mejor y les gustan un poco más, y esto hace que guste más ver la información meteorógica. Hemos hecho un esfuerzo por llegar más a la gente.
Por cierto, ¿con qué clima se queda usted, con el de Galicia o el de la meseta?
Para mí como clima prefiero, sin duda, el gallego, años luz. Me gusta más, supongo también porque forma parte de mi infancia, mi vida… El clima madrileño es demasiado seco, el clima de las mesetas, sobre todo la sur, para mí es demasiado seco. Además en Madrid tienes el inconveniente de que como es una ciudad muy poblada satura un poco la contaminación, es un poco agobiante.