Todas las victorias son importantes, pero algunas, como la que el Racing consiguió ante el Celta B, lo son más. Los tres puntos que el equipo ferrolano sumó en Barreiro le permiten mantener cuatro de ventaja sobre segundo y tercer clasificado –Racing de Santander y Tudelano ganaron sus encuentros, mientras que el Logroñés, que empató, se queda a siete– a falta de tres jornadas para el final de la liga regular. Así que el cuadro verde tiene a cinco puntos el título del campeonato liguero, que le dará más posibilidades para terminar logrando el ascenso a Segunda, su objetivo para la presente temporada. “Dependemos de nosotros mismos, lo tenemos muy bien y no se nos puede escapar”, explicó el capitán racinguista, Pablo Rey.
Pero la plantilla no lanza las campanas al vuelo sino que, tal y como recuerda Joselu, “todavía nos quedan tres finales”. La primera, el sábado que viene en el campo de O Vao ante un Coruxo que, a pesar de que haber certificado de manera matemática su continuidad en la categoría de bronce nacional, no le pondrá las cosas fáciles al equipo ferrolano. Por eso, la mentalidad de los jugadores que entrena Miguel Ángel Tena sigue siendo la misma. “Llevamos toda la liga pensando solo en el siguiente partido y eso es lo que nos va a hacer quedar campeones”, advierte al respecto el máximo goleador racinguista.
confianza
Además de tres puntos, el cuadro verde sumó en Barreiro una importante dosis de confianza con vistas a las últimas jornadas de la liga regular. Sobre todo tras la racha de tres encuentros que llevaba sin ganar. “Esta victoria nos va a dar más tranquilidad de cara al tramo final de la competición. Llevamos casi toda la temporada siendo líderes y estar en lo más alto es una exigencia muy grande, incluso mayor que la de los contrarios, porque no te puedes relajar”, explica Joselu, mientras que su compañero Pablo Rey recordó lo importante de volver a ganar tras varias jornadas sin hacerlo. “Hicimos bien nuestro trabajo”, sentenció el jugador.
En el partido contra el Celta B, el cuadro verde volvió a dejar su portería a cero, algo que ha conseguido en doce de los 16 partidos que ha disputado durante la segunda vuelta y que confirma la solvencia defensiva del cuadro verde, importante con vistas a la fase de ascenso. “En Barreiro hicimos lo más difícil, que era marcar un gol. A partir de ahí nos cerramos bien, porque sabíamos lo importante que era ganar... y lo conseguimos”, dijo Pablo Rey.